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Mostrando entradas de agosto 14, 2022

PAUSA en la segunda quincena de agosto

  No habrá poemas del 16 de agosto al 23 de este mismo mes, debido a que Felipe Garrido estará fuera del alcance de la Internet y del celular en esos días. Gracias por su comprensión.

#1916 - RIVAS SAINZ: Teoría de la música

  UN AVISO: De mañana, 16 de agosto, al 23 de este mismo mes, Felipe Garrido estará fuera del alcance de la Internet y del celular. No habrá poemas en esos días. De “Teoría de la música” Opus Tormenta La lluvia hecha tormenta. La alquería se humedece en perfume y alegría. Se marchita la tarde en cada cosa, agonizando en rojo-nieve-rosa. El viento despelecha los ramajes con sus garras de hálitos salvajes. Deja implume de verdes la osamenta del aterido bosque –cornamenta de millones de ciervos retejidos en vórtice de cuernos retorcidos. Mas los troncos al fuego reflorecen con rosas de ignición que fosforecen, dando al hogar sus pétalos-calores –mientras afuera aúllan los horrores– y al corazón la luz con que se ama –mientras afuera la ventisca brama. Arturo Rivas Sainz (1905-1985) Opus Segunda lluvia, inversa Se nubla de rosales el jardín y llovizna perfume de jazmín. Aromando en su olor la nube hojosa –de relámpago y trueno sonorosa–, q

#1915 - CARRERA: El animal más hermoso del mundo

El animal más hermoso del mundo. Ava Gardner, cobijada por las estrellas, la playa La Condesa y el mar tibio que mojaba sus pies, se sintió de pronto enamorada. Le parecía increíble: enamorada de ese hombre de rostro chueco y delgadez increíble, que la seducía con música y palabras. Caballero de oro, le dijo. Flaco seductor y elegante, lo llamó. Hombre de Acapulco, y se acercó a él para darle un beso. “Ava Lavinia Gardner, ¿qué haces?”, se detuvo. Él reconoció la huida y fue a buscarla. La tomó de la cintura. Ella volvió a alejarse, cauta. Asumía su papel de mujer casada. Habían burlado al sabueso de Howard Hughes, pagándoles a dos meseros para impedirle salir del baño mientras ellos huían, subían al carro y se enfilaban a la noche acapulqueña. Pero los sabuesos eran sabuesos y seguían rastros. ¿Qué tal si ahora los observaban y tomaban fotos para engrosar el dossier de los amores y engaños? –¿Sabes? –dijo, para distraerse a ella misma y a Agustín Lara–. M

#1914 - PULIDO: Memoria del mar

  Memoria del mar 1 Innombrable, Innombrado, Invisible en su desnudez siempre cambiante, inmóvil en su perpetuo movimiento: mar de mis ocultas tempestades, mar de la distancia y del encuentro. De noche, alguna vez, en algún puerto, dormida en el rumor de tu silencio pude mirar en sueños el recuerdo de tus constelaciones sumergidas, mientras mi sombra abandonaba el ancla de este cuerpo y ensayando su líquido linaje, su imaginaria libertad, era una con las rocas y la espuma. Supo entonces (ahora lo ha olvidado) los secretos del abismo que tú engendras y conoció los reinos que la bruma edifica y desvanece. Ay, si mi sombra perdida en tu misterio hubiera entrevisto los oscuros países que atesoras, para inventarse otro cuerpo y olvidar al que dejaba dormido allá en la arena… 2 Tan breve es el oleaje de la dicha como inasible el canto de todas las sirenas. Perdido está mi aliento entre tus brazos que me saben ceñir, que vuelven, que se han ido, que sólo he de so