Coplas del amor feliz
1469
Los barandales del puente
se estremecen cuando paso;
chinita mía, dame un abrazo.
1470
En el centro de la mar
suspiraba una ballena
y en el suspiro decía:
"Dame un abrazo, trigueña."
1471
Del cielo cayó un pañuelo
todo lleno de adornitos,
y en una esquina decía:
"María, dame besitos."
1479
De tu ventana a la mía
no hay más que un trecho;
arrímate, vida mía,
dame uno becho.
1480
Desde lejos tierras vengo,
de pelear con la sirena;
ahora que vengo rendido,
dame tus brazos, morena.
1481
De tierras abajo vengo,
de rezar una novena;
ahora que vengo santito,
ven, abrázame, morena.
1462
Si tu boquita fuera
una manzana verde,
toda la noche estuviera
muerde que muerde.
1463
Un beso te quiero dar,
pero de fijo no sé
ni cómo lo he de empezar,
ni cuándo lo acabaré.
1464
Dispénsame, jovencita,
que aquí me tienes presente;
yo quiero besar tu boquita:
dime si te es consecuente.
Yo no tomo "Coronita"
me gusta más la aguardiente.
1465
Anoche me confesé
con un fraile carmelita,
y me dio de penitencia
que besara tu boquita.
1530
Éntrale, negra bonita,
vente conmigo a bailar
esta alegre chilenita
que te voy a dedicar,
pero cuida tu boquita:
no te la vaya a besar.
1466
Qué bonitos labios tienes
labios color de manzana
si tú me correspondieras
yo te probaría mañana.
1499a
Manzana, ¡quién te comiera
acabada de cortar,
con ese color por fuera
y tu sabor sin igual!
1499b
Manzana, quién te comiera
acabada de cortar,
con tus colores por fuera
y un aroma sin igual.
Dámela a probar siquiera
no se me vaya a antojar
y del antojo me muera
en medio del manzanar.
Cancionero folklórico de México.
Tomo I Coplas del amor feliz
Textos recopilados y editados por investigadores
de El Colegio de México, bajo la dirección de
Margit Frenk (Hamburgo, 1925)
México, 1975 (1ª reimpresión, 1998).
2197 Un poema al día, para que quienes puedan se lo pongan encima y lo atesoren en la memoria.
8-VI-2023. Selección de Felipe Garrido.
Bernardo Bátiz: No siempre Felipe las mentiras son transparentes, las hay opacas, densas, hay que adivinarlas entre los datos que logras obtener. Recuerda que fui Procurador, investigaba delitos, maldades, suicidios. Aprendí a buscar datos, pistas, para llegar a las verdades y dejar a un lado las mentiras. También hay mentiras piadosas: las he oído y las he dicho. Ahora ya viejo, escucho algunas referidas a mi, a mis artículos, a mi salud. Eres un roble, me dicen y sé que no es cierto, pero sonrío. Mi reconocimiento y mi saludo, como siempre con mi agradecimiento. Una verdad: yo si compré varios ejemplares de esa obra de arte que es Mentiras transparentes; regalé ejemplares, a la maestra Elisa, a Héctor, a Susa mi hija. Y leí algunos de esos cuentos breves, insinuantes, redondos, imaginativos, verdades como una montaña con apariencia de mentiras. Y digo la mía; seguiré leyéndolas de vez en cuando. reconfortan, transportan a otro lado de la cerca, a la laguna, lejos de oficios, actas, noticias.
FG: Lo sé, querido Bernardo, y te lo agradezco. Muchos otros amigos también lo han hecho y eso me hace enormemente feliz. Comprar un libro de un amigo, asistir al teatro para verlo, acompañarlo en una conferencia o en una exposición o en un concierto es el gesto más solidario y cariñoso que nos es dado tener con nuestras amigas y nuestros amigos que trabajan para el público-
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