Sofía
Sofía descompuso los relojes y se nos vino encima la eternidad,
con sus demonios y sus grillos y sus lágrimas gordas y toda su pereza.
Sofía me deletrea y se equivoca,
está ebria y pregunta por mí, y nadie, ni siquiera la luna,
le responde.
El cristal que la cubre me refracta. Me estoy volviendo otro, Sofía, no me dejes aquí.
Y canta, ajena a su eternidad, joven para siempre, como un hermoso tigre disecado.
Rocío González (1962)
El animal
En el extremo ardor yo soy el animal
herido por la flecha sagrada
y él lame mi sangre en un festín
impúdico y vehemente. No hay combate.
Soy su presa y me ofrezco:
en su hambre está mi plenitud
(este hecho simple lo tambalea)
mi cuerpo, en su violenta floración
no duda, y él entiende. Cuando acepta
mi carne y se sacia, lo sabemos.
Cada uno ofrece su nombre.
EL AMOR ES UN CONOCIMIENTO ANÓMALO.
Rocío González (1962)
Antología general de la poesía mexicana.
Poesía del México actual.
De la segunda mitad del siglo XX
a nuestros días.
Selección, prólogo y notas
de Juan Domingo Argüelles.
Océano, México, 2014.
2154 Un poema al día, para que quienes puedan se lo pongan encima y lo atesoren en la memoria.
25-IV-2023. Selección de Felipe Garrido.
Reacciones a la selección previa:
Bernardo Bátiz: Para la fiesta del libro:
Escribo porque leo. Pienso con cierto orden, porque leí ciertos libros.
Disfruto el bien, la belleza, la verdad en que creo, porque leo. Amo porque leo.
Me equivoco y lo percibo porque he leído.
Busco la salvación escuchando, cada domingo, lecturas en voz alta.
Armando Olvera: He disfrutado mucho la entrega de hoy (24-IV-2023), con textos de Flamencos. Viaje a la generación perdida, gran libro póstumo de don Manuel Herrera Rodas. ¡Qué belleza de trabajo! ¡Me atrapó! Una vez he estado en Granada. Conocí la Alhambra, y dos noches fui a las cuevas de flamenco. Eso fue suficiente para quedar cautivado; como hoy al leer estos fragmentos tan humanos, tan sentidos.
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